Gastnutzer
29. Oktober 2021
En este hotel hicimos dos noches. La primera llegamos ya de noche procedentes de Curtea de Arges, la carretera Transfagarasan y Sibiu. Como no habíamos cenado, nos dejaron entrar al comedor y pedir algo para cenar antes de cerrar cocinas, lo cual fue de agradecer. La comida servida fue correcta. Dicho salón, que se usaba también para el desayuno buffet era amplio y con distancia entre mesas. Hasta ahí lo bueno. Nos ocurrieron dos cosas desagradables. La primera es que entregamos unos pantalones para que fueran lavados y cuando los pedimos al día siguiente no los encontraban y cuando aparecieron la mancha que tenía no se había quitado del todo. Y la segunda es que en la última noche subimos hasta el hotel y habíamos comprado algo de cenar por el camino, ya que la carta del restaurante era bastante escueta y no queríamos repetir lo de la noche anterior. Cuando nos sentamos en las mesas que tenían en el exterior para pedir bebidas y algo de comer de carta (por aquello de no echarle demasiada cara y consumir algo del hotel), el camarero nos espetó que las cocinas estaban cerradas y eso que era más temprano que la noche anterior! A partir de ahí todo fueron malas caras, comportamientos un poco pasotas por parte del camarero y respuestas cortantes y desafiantes. En definitiva, el trato no fue muy bueno y el hotel no estaba ni siquiera cerca del centro de la ciudad. Lo mejor, el precio, unos 47,50€ la habitación doble, con desayuno incluido. Si volviera, buscaría otra opción.
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