Bamboo Club Ifaty

We stayed here for 3 nights as part of a tour of Madagascar. It is located on the beach and we rented paddle boards to use in the ocean. They also had badminton & ping pong and could arrange other activities (dugout canoe rides, snorkeling, etc.). The beds were comfortable with excellent mosquito netting and good water pressure/plenty of hot water. The food is mediocre- we ended up going to other nearby place to eat. Good cocktails.

Ho soggiornato solo una notte, poi mi sono spostata in altra struttura. Bungalow carini sembrano le piccole case delle fiabe. Ma dentro piccole, letto piccolo, zanzariera come se non ci fosse perché non copriva tutto il letto, se coprivi da una parte scopriva da un altra ,oltretutto c'erano parecchi buchi e purtroppo c'erano tante zanzare Acqua calda presente.

Como casi todos los hoteles de esta zona es muy justo. Bungalows con escasa luz natural y menos de artificial, Las ventanas sin tela mosquitera, los techos de paja no cierran bien. Wifi solo en recepción, a ratos y fluctuando. El servicio correcto. Éramos los únicos huéspedes aquel día.

Hotel en la misma playa de Ifaty. Tiene una piscina y luego de allí bajas a una pequeña playa particular del hotel (si bien están allí, como en todos los hoteles, jóvenes vendedores de camisetas, abalorios, etc… que te atosigarán). El hotel está bien, pero como todos los hoteles - al menos de esta gama llamémosla media - es carencial. La luz en las habitaciones es escasa. No puedes cargar casi nada en un aparato que hay para ello en la habitación. Debes de entregar baterías portátiles, o para cámaras de fotos, en el bar para que te lo carguen ellos). La habitación está carente de luz natural. O mejor, no tienes ni cristales en las ventanas y el techo está solo cubierto por cañas. En cierta forma estas a la intemperie. Como ciertas las ventanas para que no te vean, pues quedas sin luz. Y la luz artificial casi no alumbra. Todo es muy precario. Es posible que no tener cristales en las ventanas y que todo sea muy rústico sea bueno para Primavera verano ( allí a partir de octubre hasta marzo abril). Pero en mayo, o junio - en el otoño austral - hace frío. Y en las noches aún con mantas, pasas frío. En fin, también hicimos allí dos desayunos al menos. La atención del personal es correcta. Pero como todos todos los hoteles, o como todo el país, todo es muy precario. La numeración de los bungalows es un lío. Han hecho nuevos y viejos bungalows, y así la numeración no es correlativa. Uno leva lógica alguna. Tienes que aprender como ir…sin luz… o con tu imprescindible linterna que llevas allí como si hubieses llevado oro. Tendrás Atardeceres fabulosos.

La habitación estaba sucísima, las sabanas y toallas olían mal. Claro que es un lugar donde hay bichos y mosquitos, pero eso no es razón para que la habitación este en tan pésimas condiciones de limpieza. Además muy caro el restaurante,, un amigo pidió 2 plátanos (muy pequeños) y le cobraron lo que cuesta un kilo de plátanos, aquí en España. Vergonzoso la forma de cobrar a los turistas.. mucho cuidado!!!