Gastnutzer
16. Juli 2023
El hotel es muy antiguo y necesita una renovación completa. El mobiliario demodé, la cama incómoda. El aseo minúsculo, el aislamiento acústico inexistente: escuché los ronquidos de la habitación de al lado perfectamente. Pero con todo, lo peor es el servicio. Solo dos camareros para atender todo: el bar, la terraza, el restaurante y la recepción del hotel. Los pobres van desbordados. Los vasos, tazas y platos usados se amontonan en la barra del bar dando una imagen lamentable. Los tiempos de espera insoportables. Muchos clientes cabreados porque no les atienden deciden irse a otro establecimiento. Cuando al final te toman nota, la espera es eterna hasta que te sirven... Ahí harían falta por lo menos 3 empleados más. Si el objetivo es ahorrar costes y tener más beneficios, el resultado va a ser el contrario: cada vez van menos clientes y hay menos ingresos. Un servicio reducido, y por tanto lento, es la mejor fórmula para llevar un negocio a la ruina.
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