Careyes Villa de Mar & Spa

4 años eligiendo Careyes en diferentes épocas del año. La atención desde la llegada, durante la estadía y en la salida te hace sentir como en casa. Siempre me hospedé en habitaciones "suite playa" siendo muy cómodas, equipadas con aire split frio-calor, cortinas black-out, heladera frigobar con congelador, pava eléctrica, vajilla, smart tv, placard y cama sommier grande y cómoda. Con un hermoso balcón con sillas y mesa. El predio es muy amplio y está perfectamente cuidado e iluminado en cada detalle todo el año. La piscina cubierta climatizada y el spa son excelentes. El desayuno se sirve en modalidad buffet en un amplio horario en el restaurante y es muy completo, con opciones variadas de alta calidad en pastelería, fiambres, jugos naturales, frutas con yogurt y cereales, huevos revueltos hechos en el momento a pedido e infusiones. Cada año mejora aún más y siempre están abiertos a conocer y escuchar las sugerencias y necesidades de los huespedes. Todo el team es para destacar, Estela en cada detalle, Agustina, Luján, Chiara, Paz, Rufino y todo el equipo que está a disposición las 24 horas. Durante la temporada de verano incluye servicio de playa con sombrilla y reposeras haciendo la estadía más que completa. La ubicación es ideal, cuenta con acceso a la playa con subida por escalera y se puede llegar al centro a pie en 10 minutos por lo que no es necesario usar auto en toda la estadía. Una experiencia más que recomendable.

Estuvimos 4 días perfecto desde la amabilidad con que nos recibieron Agustina y Maxi siempre a disposición y buena onda. Belén que nos ofreció circuito spa. Una genia. 10 en todo, limpieza, comodida, desayuno completo con muchas opciones y todo cacero. cercanía de la playa todo óptimo para pasar unas vacaciones de desconeccion total. El resto sushi club que funciona en temporada que tiene opciones muy muy recomendables el risotto con mariscos una delicia. Sin más que decir que volveremos!!!!!

Vamos a lo positivo Saludable y completo desayuno Comodas camas Pileta bien climatizada Instalaciones bastante bien mantenidas. Personal super atento Ambiente calido con su hogar encendido. Dos cosas bajaron el nivel las comento para que las mejoren 1ero. La habitacion tenia una puerta cerrada que daba otra habitacion. Se escuchaba todo. Deben procurar garantizar una reserva acustica acorde con la categoria del hotel. 2do. La factura extendida por el.pago en efectivo no esta en regla. Algo que causa una cierta perplejidad en un hotel que presume alta categoria.

Muy lindo lugar. Estuvimos en el sector hotelero. Está ubicado muy cerca del centro comercial y tiene salida propia a la playa. Excelente desayuno . Habitación muy cómoda.

Hermosas cabañas: tuvimos problema con la calefacción pero lo solucionaron cambiando el equipo. Nuestra habitación no tenía teléfono. El spa es hermoso aunque un poco desorganizado el tema de los turnos. El personal es muy amable. La sala de estar con la fogata es un lugar ideal para sentarse a leer o descansar. A veces ponían café o te sin cargo y me pareció una excelente idea. El desayuno muy rico aunque solo cada 3 días servían huevos. Quedaba chico el lugar para tanta gente ya que era vacaciones de invierno. El acceso a la playa es muy cómodo. La limpieza genial. Volveremos!

Estuvimos en una cabaña para 5, cómoda. Remodelada barato, no de buena calidad. Falta mantenimiento (no se puede regular bien la ducha, faltaban algunas luces). Buena cantidad de cajones y placards. Tenés todo disponible para cocinar. Es muy silencioso para dormir. Los colchones son nuevos pero no de buena calidad (duros, te vas para los costados) y dormir es complicado. El desayuno es super abundante, bufet libre (de lo mejor del lugar). Se sirve en el mismo sushi club. La piscina descubierta es chiquita pero suficiente; la usa poca gente. Y en la otra parte del complejo hay una climatizada con spa (masajes, excelentes), mesa de ping pong, pool, lindo espacio. Lo que no te dicen es que NO ES APTO PERSONAS MAYORES O DISCAPACITADOS. Tenés que subir el médano por escaleras pero la bajada a mediodía y tarde temprano (la subida es peor) es super dolorosa. llevate medias o zapatillas porque la pendiente es empinada y la arena hierve. No hay servicio de playa ni toilettes. Solo sombrillas y reposeras (te podés llevar las toallas de pileta de la habitación). La atención del personal es muy buena, muy amable. Está muy bien ubicado, a 5 minutos a pie del centro. Dejás el auto (no cubierto) y no lo sacás en toda la estadía. Si hicieran un buen mantenimiento, tuviera buena construcción (al menos el complejo de cabañas de la parte del sushi club - que es donde estuvimos -) y sobre todo si hicieran algo con la parte de la playa del médano, valdría más la pena el gasto, porque es caro comparado con un Airbnb a la playa, por ejemplo. Pensar en ir y venir de la playa, ya te cansa.