Bornes de Aguiar Gastfamilien

Un paraiso en tierras lusas. Hemos estado allí, después de un año complicado, sentimentalmente hablando, por lo que mi mujer decidió regalarnos un pacote romántico, y de paso regalarme una ilusión nunca satisfecha, hasta ahora de dormir en una cabaña, pero aún fue mejor, porque conseguimos una casa arbol de las que dudrmes viendo las ramas sobre tu cabeza y a tus pies. La experiencia superó todas las expectativas: Las casas maravillosamente cómodas y acogedoras, el entorno forestal idílico, la gastronomía del restaurante fabulosa, la atención de todo el staff de recepción y de los camareros del restaurante superprofesional, amabilisima y encantadora. Muchisimas gracias a todos ellos, y ruego me disculpen por no acordarme de los nombres de todos. ¡Volveremos, sin duda!